Tiempos de vino y rosas estos que futbolísticamente estamos viviendo con nuestro Madrid líder en la Liga tras aplastar a los innombrables, líder en nuestro grupo de Champions y perfectamente encarrilados en la copa del Rey.
Como nota y muy negativa la infortunada lesión de Modric, que junto al bávaro Toni Kroos llevan la batuta de este equipo que cada vez juega mejor, esperemos no más lesiones.
Lo cierto y a la vez innegable es que en el tema de las selecciones nuestro equipo SIEMPRE pierde, convocados un gran numero de jugadores madridistas en cada partido incluidos las pachangas amistosas, corremos un riego atroz de perder nuestros mejores jugadores, cuando que nadie lo olvide el que paga es el club con sus socios y no las federaciones correspondientes.
En apenas un par de años, la selección de nuestro país, (me niego a llamarla la roja), ha dinamitado la ilusión de sus seguidores, creando mal ambiente con gentuza que debería estar contando batallitas a sus nietos, con otra que no jugaría nunca en una campeona del mundo, o por convocar amigos del peor entrenador y a la vez con más suerte del mundo, que dicho sea de paso, la suerte se esfumó.
Dolido me hallo que me tire casi un mes en volver a mi amado Santiago Bernabéu, para ver a los jugadores que pago con mi abono y carnet de socio, mientras que las pachangas internacionales de selecciones las subvenciona empresas aprovechadas.
Español como el que más quiero que gane siempre mi selección, pero cuando veo a jugadores boca-chanclas y polla-bobas con un sentimiento nacionalista contrario al mío me entra la mala hostia, entonces cuando miro al banquillo y veo a al mister se me pasa la mala hostia y me entra la peor hostia.
Un consejo amiguitos es en estos días de soledad futbolera poneos el partido de la Décima y seguro que os venís arriba.
Hala Madrid